Arredo trae lo nuevo: presenta su colección otoño-invierno 2019 (en su sucursal de Jujuy)

La nueva temporada de la marca de ropa de casa, decoración, sillones y mobiliario está inspirada en la cultura millenial, fantasiadelic y naturalistic. También lanza una línea de productos sustentables, hechos de materiales reciclados.

Las líneas que desarrolló Arredo para temporada "fría" son cuatro: millenial, fantasidelic, naturalistic, y de productos sustentables:

  • Millenial: basada en la generación nacida entre 1981 y 1995, hace hincapié en la flexibilidad, la fluidez, el aquí y ahora. Es decir, une la practicidad con la búsqueda del placer. Los colores que predominan son rosas, amarillos, azules y tonos de grises. Las estampas, por otro lado, son geométricas, abstractas, con manchas y situaciones "urbanas".
  • Fantasidelic: se enfoca en paisajes, arte e imágenes con efectos de colores y distorsiones. Su eje central es proponer imaginación y juego mediante los colores brillantes y algunas formas surrealistas. Los tonos que se incluyen en su paleta son naranjas y rosas. Las telas, por su parte, son terciopelo y jean con algunos bordados o lentejuelas.
  • Naturalistic: se inspira en tribus urbanas que vinculan su desarrollo personal y profesional con medidas a favor del medioambiente. La paleta de colores está relacionada con la naturaleza: tonos arenosos, cálidos y tonos oscuros. Las telas que se utilizan son lino, yute, rústicos, tejidos, lana, madera.
  • Productos sustentables: utilizan materiales reciclados. Lo que resalta de esta línea son sus materiales y forma de fabricación. Los productos que se ofrecen son mantas y frazadas hechas con sweaters recuperados (en organismos que destinan esos fondos a ayuda social y se reutilizan en lugar de desecharse) y con pet reciclado (un tejido compuesto de botellas plásticas lavadas y trituradas).

Neuquén apuesta al cáñamo industrial para un desarrollo económico y ambiental sostenible

La provincia de Neuquén avanza en la diversificación de su matriz productiva con la incorporación del cultivo de cáñamo industrial. Este proyecto, liderado por la Fundación GEN en asociación con la empresa Tecnocomahue S.A. y respaldado por el Centro PyME-Adeneu, se implementará en Chos Malal y en la margen sur del lago Mari Menuco. La iniciativa busca aprovechar las propiedades multifacéticas de esta planta, destacando su capacidad para capturar dióxido de carbono (CO2) y su amplia gama de aplicaciones industriales.