Este “semáforo virtual” se conforma a partir de las respuestas de conductores y propietarios de camiones de algunas de las 4.500 PyMES que integran las 44 Cámaras de transporte nucleadas en FADEEAC. Ahora, el último relevamiento, se da en el periodo entre el 18 y 27 de julio.
Entre algunas conclusiones generales, la escasez se redujo a costa de un aumento generalizado del precio de los combustibles. En este sentido, el informe detalla que no se trata de una consecuencia menor, pues históricamente el combustible es el principal insumo de la actividad de transporte por rutas, habiendo llegado a representar en febrero de 2022, previo a la crisis, entre un 35% y un 40% en la estructura de costos para los trayectos de media y larga distancia.
En la actualidad se observa un abastecimiento que mayoritariamente se da a través del Euro 5, que resulta indudablemente un tipo de gasoil más costoso, lo que colabora en el aumento de los costos para el transporte y la logística.
“Previo a la crisis de abastecimiento de los combustibles sólo un 13% del consumo de los vehículos pesados demandaban Euro 5, el resto utilizaba gasoil común (o grado 2). El diferencial de precios en ese momento (febrero de 2022) entre uno y otro tipo era de 21,5%. En julio de 2022, conforme los precios de combustibles que habilita YPF y sus operadores asociados en OPESSA (operadores de Estaciones de Servicio S.A.), el valor del gasoil común (en CABA) se encuentra en el orden de los $128,10 por litro, mientras que el Euro 5 asciende a $175 por litro, con lo que la diferencia de precios se amplió y ahora resulta del 36,61%”, explican los especialistas en Energía que integran el Departamento Técnico e Infraestructura Vial de FADEEAC.
“Tras más de cuatro meses de anormalidades soportadas por los transportistas, el segmento más vulnerable de la cadena energética, desde FADEEAC solicitamos se auditen transitoriamente los mercados de abastecimiento de combustibles para el transporte pesado. Aunque con diferente intensidad según el lugar del país del que se trate, los problemas de abastecimiento continúan. Ahora el ajuste no es por cantidad sino por precios”, dijo Roberto Guarnieri, presidente de FADEEAC.
La situación en cada provincia:
El mapa muestra tres provincias en rojo (con alto impacto de desabastecimiento en las que hay muy bajo o nulo abastecimiento, y mayor demora en la carga de combustible): Santa Fe, Entre Ríos y Misiones.
Seis provincias en naranja intenso (correspondiente a un promedio de suministro es de entre 21 y 50 litros por unidad, demoras sustantivas en los tiempos de espera y sobrecostos): Jujuy, Córdoba, Mendoza, San Juan, Corrientes, Formosa.
Tres provincias en naranja (con un promedio de suministro es de entre 51 y 100 litros por unidad; tiempos de espera sustantivos y sobrecostos): Buenos Aires, Río Negro, Nequén.
Nueve distritos en amarillo (con un promedio de suministro inferior al normal y se registran demoras leves para la carga): Salta, Tucumán, Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja, Chaco, San Luis, La Pampa y CABA.
Y tres provincias en verde (sin problemas de abastecimiento, suministro ilimitado de combustible sin restricciones): Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego.