No es nuevo que las provincias del denominado “Norte Grande” fueron y son las históricamente postergadas en materia de progreso y desarrollo económico industrial. Los gobernadores, hace décadas solicitan a los gobiernos nacionales una mirada inclusiva y más igualitaria y parece que este encuentro en Catamarca quedará en la historia.
Un Régimen de Promoción de Generación de Empleo para provincias de NOA y NEA con una reducción de contribuciones patronales de hasta el 80%, fue anunciado en el marco de un nuevo encuentro del Consejo de Gobernadores del Norte Grande, del que participó el gobernador jujeño Gerardo Morales.
El presidente Alberto Fernández anunció en San Fernando del Valle de Catamarca un sistema de reducción de aportes patronales para las diez provincias que forman parte del norte argentino que lleva implícito un "régimen de promoción para la generación de empleo". De esta forma, el jefe de Estado ratificó su compromiso de luchar contra las asimetrías que existen entre las provincias del Norte Grande.
Según anunció el 80 % si la persona contratada es mujer, travesti, transexual o transgénero.
Morales sostuvo que el régimen se encuadra en una “importante medida” direccionada a “generar más empleo formal en la región”. Y apuntó que “las empresas de las provincias del Norte Grande accederán a un régimen diferencial de contribuciones patronales con descuentos muy significativos, un paso muy positivo para corregir desigualdades históricas.
Según se informó oficialmente, el nuevo régimen propone una rebaja gradual y temporaria de las contribuciones patronales por las nuevas relaciones laborales, durante un periodo de tres años, en sectores económicos determinados orientados a la producción de bienes.
Como condición para acceder al beneficio se establece como requisito que los empleadores y empleadoras deberán producir incrementos en su nómina de personal oficial y a la medida anunciada se suman mayores beneficios si la contratación es hacia mujeres y disidencias.
Así, mientras que la contratación de un varón otorga una reducción del 70% durante el primer año, 45% el segundo y 20% el tercer año; una mujer o una travesti, transexual o transgénero tendrá 80%, 55% y 30%.
De esa manera, los empresarios deberán pagar por cada nuevo empleado varón 5, 10 y 14% en cada año por cargas patronales, mientras que abonarán 4, 8 y 13% por cada mujer o disidencia contratada.