La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) había solicitado un análisis de impacto social y económico del covid-19 en la región, y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) de Naciones Unidas respondió con un informe que preocupa.
El Informe fue publicado en el Observatorio COVID-19 en América Latina y el Caribe, que recopila y pone a disposición dos grupos de datos: uno, las políticas públicas que los 33 países de la región latinoamericana y caribeña están tomando para limitar el impacto de la pandemia; y el otro, los del análisis de los impactos económicos y sociales que tales políticas tendrán.
Los datos que comparte la publicación debieran tenerse en cuenta desde ya en cada Estado del centro y sur del continente y sus islas. Son 14 páginas en donde, primero, analiza los efectos a nivel mundial y, luego, los efectos en la región: los referidos a 1) impactos económicos (desde los indicadores de pobreza a los impactos en el turismo, entre otros), 2) impactos en el comercio internacional, 3) el acceso y el uso de internet, y 4) impactos sociales. Además, brinda algunas recomendaciones políticas para los Estados a tomar en el corto y mediano plazo.
Entre otros análisis, el informe desmenuza, por ejemplo el referido a los costos económicos del ailsamiento y distanciamiento social: entre los efectos indirectos en oferta y la demanda, la suspensión de la actividad productiva interna que abarca Educación, Comercio, Turismo y Transporte, Manufactura y Recursos Naturales, enlista los de:
- a corto plazo: mayor desempleo, menores salarios e ingresos, aumento de la pobreza y la pobreza extrema y mayores costos, fragmentación y desigualdades en el sistema de acceso a la salud; y
- a mediano y largo plazo: quiebra de empresas, reducción de la inversión privada, menor crecimiento económico, menor integración en cadenas de valor y deterioro de las capacidades productivas y del capital humano.
De las 613.476.000 de personas que hoy somos en el sur del continente, finalizaremos 2020 con 619.205.000. De ellas, 209.583.000 serán pobres, 23.639.000 más que el año pasado.
Hace unos días, ya compartimos con vos (aquí) la advertencia de Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la CEPAL: el mundo debe repensar todo en materia económica.
Para adentarte en el informe, podés visitar el Observatorio Covid-19 de la CEPAL (aquí) o descargarlo aquí.