El turismo, conocido como la “industria sin chimeneas”, se presenta como un sector estratégico que impulsa la economía sin generar contaminación industrial directa. En Jujuy, esta actividad se traduce en un motor de desarrollo regional, capaz de generar empleo, activar el comercio local y atraer inversiones.
La provincia se distingue por su diversidad de climas, relieves y paisajes, complementados por una riqueza cultural ancestral que cada año convoca a miles de turistas nacionales e internacionales. Esta combinación de factores convierte al turismo en un pilar económico con un fuerte impacto en la hotelería, gastronomía, transporte y comercio, así como en nichos laborales especializados, como los guías turísticos, que transmiten la historia y la identidad local.
El crecimiento del sector requiere acompañamiento en términos de formación de recursos humanos calificados, capaces de responder a un turismo cada vez más exigente y globalizado. La inversión en capacitación asegura la calidad del servicio y potencia la competitividad del destino, consolidando a Jujuy como referente turístico.
Así, la “industria sin chimeneas” no solo genera ingresos y empleo, sino que posiciona a Jujuy en el mapa de los destinos más atractivos de Argentina y del mundo, ofreciendo oportunidades de desarrollo económico sostenido y diversificado para toda la región.