La nueva graduada de 23 años, Ingeniera Industrial Carmen Teresita Bowyer Vergara expresó su alegría por la finalización de su etapa universitaria. “Estoy muy feliz por el logro alcanzado y muy entusiasmada por los próximos desafíos y aprendizajes”, dijo. Actualmente, trabaja en la industria minera y participa de un programa de mentoring de Women In Mining Perú. “Espero poder seguir conociendo esta industria y formándome para cumplir otras metas”, auguró la flamante profesional.
Su investigación
El Trabajo Final de la Ing. Bowyer Vergara: "Análisis de alternativas tecnológicas para mejorar la eficiencia del agua en el proyecto Cauchari-Olaroz" tuvo por objetivo el “desarrollar un estudio a nivel pre-factibilidad de una tecnología aplicable a las pozas de almacenamiento de agua de uso minero para disminuir el consumo específico de este recurso, contribuyendo así con el cumplimiento del ODS (Objetivo de Desarrollo Sostenible) Nº 6 del Pacto Global de Naciones Unidas”. Y adelantó que se espera la implementación de la tecnología escogida para el año 2023.
Al referirse a su motivación por el tema de investigación, la nueva profesional compartió, “el proyecto surgió a partir del compromiso con las comunidades aledañas a la empresa de desarrollar una minería responsable, transparente y sostenible, ayudando a garantizar la disponibilidad y gestión sostenible del agua”, indicó.
Para alcanzar su objetivo de investigación, la jujeña analizó la tasa de evaporación representativa en función de las variables que gobiernan la evaporación y estimar la pérdida de agua diaria en las pozas de almacenamiento; identificó los criterios de diseño tanto técnicos, económicos, sociales como ambientales de la empresa, utilizando diferentes fuentes de información tales como bases, criterios de diseño y otros documentos del proyecto; analizó y seleccionó la tecnología más apropiada a la realidad de la empresa; determinó la viabilidad técnica-económica de la tecnología seleccionada; desarrolló el análisis de impacto ambiental de la alternativa seleccionada; y finalmente evaluó el impacto de variables inciertas en los indicadores económicos mediante un análisis de riesgo.
Respecto de los resultados de su Trabajo Final, la Ing. Carmen Teresita Bowyer Vergara indicó que se logró cumplir con los objetivos propuestos. “Se concluye que la implementación de este tipo de tecnologías y la ejecución de proyectos de esta índole es viable, rentable, atractiva y sostenible”, sostuvo. “Entre las opciones analizadas en detalle, la alternativa seleccionada es la número 1, es decir, la cubierta de bolas, aún que el VAN de esta alternativa es 1% más bajo que la segunda, soporta una TIR 1% mayor y se observa que su variación es en el análisis de riesgo menor”, detalló.
El desarrollo de la propuesta de Trabajo Final
En vista de su objetivo de desarrollar a nivel de pre-factibilidad un estudio y selección de una alternativa tecnológicas para mejorar la eficiencia del recurso agua en las pozas de almacenamiento del Proyecto Cauchari-Olaroz de la compañía EXAR, la Ingeniera Industrial Bowyer Vergara realizó:
“El cálculo de la tasa de evaporación diaria mediante el método combinado entre el balance de energía y el método aerodinámico a partir de los datos de los factores que gobiernan la evaporación, obtenidos de distintas estaciones meteorológicas. Se validó este resultado y se definió que la tasa de evaporación representativa para el proyecto es igual a 6,12 mm/día. Con esta, se logró estimar que la pérdida de agua diaria en las pozas de almacenamiento es aproximadamente 93.000 L.
Luego, se identificaron los criterios de diseño del proyecto (técnicos, económicos, sociales y ambientales) utilizando diferentes fuentes de información cómo documentos de la empresa, criterios de diseño y encuestas. Con estos, se analizaron las alternativas tecnológicas propuestas mediante el método de ponderación, a partir del cual se seleccionaron dos alternativas (cubierta de bolas y cobertores modulares) para continuar con el estudio técnico, económico y ambiental.
Se desarrolló el estudio técnico de las alternativas que cumplieron con los criterios de la empresa con el objetivo de proveer información sobre el funcionamiento y del proyecto y cuantificar el monto de las inversiones y costos pertinentes, entre ellos se destacaron el potencial de ahorro de cada alternativa y el requerimiento de mano de obra en la instalación/montaje y operación continua de ambas alternativas.
Para determinar la viabilidad técnica-económica de las tecnologías seleccionadas se realizó un flujo de fondos para ambas alternativas con el fin de analizar la conveniencia de implementación de cada una y, a partir de esto, seleccionar la más apropiada. Para la evaluación económica se definió una TMAR de 20,11%, y se obtuvo para cada alternativa el VAN, TIR y Costo-Beneficio ajustado.
Cuando se evalúan alternativas de inversión mutuamente excluyentes, se suele seleccionar el proyecto que tenga un mayor VAN y mayor TIR, ya que será aquel que esté generando mayor valor en términos absolutos para una determinada rentabilidad requerida. Sin embargo, no necesariamente los dos métodos conducirán a decisiones análogas. En este proyecto los flujos de fondos son afectados de manera diferente por la tasa de descuento, presentando la variación de la VAN con distinta pendiente. Esto hace que se presente un punto de intersección denominado “Tasa de Fisher” que, en este caso, es igual a 20,83%. Esta herramienta indica que la alternativa 2, cobertores modulares, es preferible frente a la alternativa 1 con tasas de descuento menores a la Tasa de Fisher, pero conforme se incrementa la tasa de descuento, la alternativa 1, cubierta de bolas, se hace preferible hasta una tasa de 33% donde el VAN de esta alternativa se hace nulo.
También, se observó que las variables más relevantes son el precio del carbonato del litio, el precio del canon de agua, el precio de la energía, la tasa de descuento, el factor de evaporación, los gastos de importación y los gastos por imprevistos, por ello se evaluó el impacto de estas mediante un análisis de sensibilidad y simulación Montecarlo usando la herramienta @RISK, donde se comprobó que si se modifica en porcentajes estas variables existe una baja probabilidad de que el proyecto se torne inviable, es decir, sobre este último se obtuvo que la probabilidad de que el VAN sea menor a 0 en la alternativa 1 es del 0,4% y la probabilidad de que la TIR caiga por debajo de la TMAR es del 0,1%. Mientras que la probabilidad de que el VAN sea menor a 0 para la alternativa 2 es del 0,7% y la probabilidad de que la TIR caiga por debajo de la TMAR es menor al 0,6%.
Por último, se desarrolló el análisis de impacto ambiental de las alternativas seleccionadas donde se identificaron y valorizaron impactos en la etapa de implementación y operación. Como resultado se obtuvo que el proyecto posee varios impactos positivos además de la reducción en el uso del agua y el mayor impacto negativo era visual. Por lo cual se decidió que no es necesario continuar con una medida de mitigación dada la situación base y realidad del proyecto”.