COVID-19 brinda un respiro a la provincia y desde el ejecutivo se disponen los equipos para reactivar la actividad de la construcción. A pesar de ser una de las actividades consideradas esenciales desde el mes de mayo, la construcción a través del aparato de estado jujeño vive momento de gran incertidumbre, que se complementa con un mercado privado de gran especulación.
Las obras, que se van a desarrollar a partir de esta rúbrica de contratos, integran una primera etapa de un total de más de 600 viviendas programadas en el "Gran Jujuy", que comprende a San Salvador, Palpalá y Yala, las cuales ya fueron licitadas y se encontraban suspendidas por la pandemia de coronavirus, indicó el gobernador Gerardo Morales durante la rúbrica de los contratos. Y detalló que en este marco es que "se pone en marcha la primera etapa para el Gran Jujuy, mientras que en los próximos meses se ejecutarán el resto de los programas que ya están licitados, hasta completar más de 600 viviendas".
Por otro lado, el presidente del Instituto de Vivienda y Urbanismo de Jujuy IVUJ, Gustavo Muro, puso en valor que de las licitaciones realizadas, siete ya fueron aprobadas y tres ya salieron del Tribunal de Cuentas para lo que es la ejecución de las 121 viviendas para el Gran Jujuy. Y agregó que los contratos formalizados prevén una inversión de cerca de 150 millones de pesos y que ya se han iniciado los trabajos de movimiento de suelos y cercado por parte de las empresas contratistas, que son: Pedro Mario Campos SRL, Copecsa SRL UT, Wichay Servicios y Construcciones Civiles, y Jumi SRL.