Desde el 1 de junio, entrará en vigencia un nuevo régimen impulsado por el Gobierno nacional que apunta a captar parte de los más de 200 mil millones de dólares que, según estimaciones oficiales, están fuera del sistema financiero formal.
Bajo el nombre de “Plan de Reparación Histórica de los Ahorros de los Argentinos”, se busca facilitar la circulación de dólares no declarados sin penalizaciones ni fiscalización previa, como forma de "remonetizar" la economía y avanzar hacia la “dolarización endógena” que impulsa la gestión de Javier Milei.
Durante la presentación oficial, el vocero presidencial Manuel Adorni explicó que no se trata de un blanqueo clásico, sino de un cambio estructural en el enfoque del control estatal. “Tus dólares, tu decisión”, expresó, y subrayó que “los argentinos vuelven a ser inocentes hasta que ARCA demuestre lo contrario”, en referencia a la nueva Agencia de Recaudación que reemplazó a la AFIP.
El Gobierno hizo un repaso de lo que considera una década de restricciones cambiarias y controles excesivos. “El 50% de nuestra economía terminó siendo informal. El Estado, cual Gran Hermano, controlaba todas las transacciones de sus ciudadanos como si fueran criminales que merecían castigo”, dijo Adorni. Y agregó: “Normalizamos prácticas ridículas como que el Estado obligue a los bancos a informar todas las extracciones o a los comercios a detallar cada compra”.
A su vez, el ministro de Economía, Luis Caputo, remarcó: “No son delincuentes, son la gran mayoría de los argentinos que fueron abusados por exceso de impuestos y de controles”. Según el funcionario, este nuevo marco normativo busca devolver libertades y fomentar el ahorro e inversión privada. También aclaró que el Gobierno no prevé devaluaciones, y que la estrategia seguirá enfocada en reducir impuestos, eliminar regulaciones y mejorar el clima de negocios.
¿Qué cambia con el nuevo régimen?
El titular de ARCA, Juan Alberto Pazo, detalló los principales puntos del nuevo esquema, que deroga diversos regímenes informativos y eleva los montos a partir de los cuales el Estado puede fiscalizar operaciones. A continuación, las claves:
Se eliminan:
- El régimen informativo de consumos personales con tarjeta y billeteras virtuales.
- El CITI Escribanos (informes notariales).
- El régimen de compra-venta de autos usados.
- El informe obligatorio del pago de expensas (antes desde $32.000).
- El Código de Oferta de Transferencia de Inmuebles (COTI).
- El régimen de consumo de servicios públicos (luz, agua, gas, telefonía).
- La obligación de los bancos a pedir declaraciones juradas sobre impuestos nacionales.
Se actualizan los umbrales de reporte:
- Transferencias bancarias: de $1 millón a $50 millones (personas físicas); $30 millones (jurídicas).
- Extracciones en efectivo: ahora se informarán desde $10 millones.
- Saldos mensuales: suben de $700.000–$1 millón a $50 millones (físicas) y $30 millones (jurídicas).
- Plazos fijos: hasta $100 millones (físicas) y $30 millones (jurídicas), sin necesidad de verificación.
- Operaciones en billeteras virtuales: nuevo umbral de $50 millones (físicas) y $30 millones (jurídicas).
- Tenencias en AlyCs: hasta $100 millones (físicas) y $30 millones (jurídicas) sin declarar.
- Información comercial: los comercios no informarán ventas hasta los $10 millones.
¿Qué impacto podría tener en el NOA?
Con esta iniciativa, el Gobierno espera que un volumen significativo de ahorros privados se canalice hacia la economía formal. Para provincias como Jujuy, donde la actividad informal tiene un peso importante en el día a día económico, el régimen podría favorecer el ingreso de dólares físicos al circuito comercial, a través del consumo, inversiones en inmuebles o compra de bienes durables. También se espera un alivio para pequeños empresarios y comerciantes que operan con limitaciones bancarias.
Desde el oficialismo aseguran que la medida representa un punto de inflexión en la relación entre el Estado y los ciudadanos, en especial con los sectores productivos. El desafío será que esta apertura genere confianza suficiente para reactivar el crédito y la inversión.
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